NUEVA YORK.- El doctor Erasmo Lara Peña, quien fuera jefe de la Misión Dominicana ante las Naciones Unidas (ONU) desde el comienzo de este gobierno, fue sacado de la delegación diplomática con sede en Nueva York y enviado a la cancillería donde realiza “trabajos administrativos”, confirmó a este reportero una fuente de alto crédito del ministerio dominicano de Relaciones Exteriores. Lara Peña, reconocido diplomático de carrera y uno de los embajadores que más cercanía mantuvo con los medios de comunicación locales y nacionales, estaba laborando bajo intensas presiones por parte de la dirigencia peledeísta local, según se lo confió a un allegado suyo antes de su partida.
Desde hace unos dos años, muchos líderes del partido oficial no ocultaban sus recelos, incluso ante el presidente Leonel Fernández y todavía sindican a Lara Peña como un “cuadro” del opositor Partido Revolucionario Dominicano (PRD).
La decisión de sacar al embajador de la jefatura de la misión fue asumida hace algo más de dos semanas por el Canciller Carlos Morales Troncoso, pero la misma fuente dijo que el presidente Fernández se rehusaba a que el diplomático fuera tocado.
Lara Peña, quien fue también uno de los pocos jefes de misión en la historia de esa representación ante la ONU que con más frecuencia hacía apariciones en actos comunitarios, culturales, institucionales y hasta políticos, se molestaba cada vez que los peledeístas requerían su presencia en actividades meramente partidistas como fue un evento de recaudación de fondos celebrado antes de las elecciones congresuales y municipales en la escuela Hermanas Mirabal en el Alto Manhattan y que estuvo encabezado por el licenciado Danilo Medina.
En esa actividad, Lara Peña dijo por lo bajo que se sentía como “un pez en tierra”, debido a que su función y compromiso con el país, no era el de estar presente en actividades proselitistas.
Se dijo además que Lara Peña fue acusado de ser el “responsable” de confeccionar un listado en el que se recomendaba al presidente de la república la suspensión y/o cancelación de varios embajadores alternos y otros funcionarios de menor rango de la misión por incumplimiento en el trabajo y estar dedicados a totalmente a la pre campaña de sus candidatos favoritos antes de la convención del PLD.
La mayoría de esos funcionarios responden a la línea reeleccionista de Leonel Fernández. Se la imputó así mismo haberse quejado personalmente con el primer mandatario de que la situación que mantienen los funcionarios del PLD en la misión, “es insostenible”.
Otra versión sostiene que la salida de Lara Peña de la misión en la ONU fue “voluntaria” y decidida por él mismo, debido a una enfermedad no especificada que padece su esposa y según la explicación, el diplomático quiso ponerse al lado de su compañera por lo que le pidió al canciller su traslado a la República Dominicana.
Varios dirigentes de la seccional del PLD en Nueva York, entre estos el embajador Luis Lithgow, aspiran a ser los sustitutos de Lara Peña y mientras tanto el embajador Enriquillo del Rosario, quien también fue involucrado en la recomendación de las suspensiones, está al frente de la jefatura.
Lara Peña dejó un récord visible en sus trabajos al frente de la misión en Nueva York, figurando entre estos sus contactos y lucha por conseguir suficiente respaldo a la candidatura dominicana honorífica en el Consejo de Seguridad, la remodelación de las oficinas, reinserción del país en el Grupo de Río y en otros tratados y convenios internacionales.
También respaldó abiertamente todas las actividades de instituciones comunitarias que pidieron se les abriera un espacio en las Naciones Unidas.
Como se ve, las versiones sobre su salida de la misión en la ONU, son encontradas, pero el hecho es que Lara Peña ya está fuera.
Sólo él y el canciller podrían clarificar si se trató o no de una medida que cedió a las presiones de sus adversarios internos dentro de la delegación.
- Miguel Cruz Tejada


